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Puede que Red Bull no haya encabezado la tabla de tiempos durante las primeras sesiones de práctica del fin de semana del Gran Premio de Hungría, pero fue un día positivo en general para el equipo, con Max Verstappen feliz por el desempeño inicial de su paquete de actualización, mientras que Sergio Pérez parecía haber progresado durante la FP2.
El equipo de Milton Keynes es uno de los muchos que han agregado actualizaciones a su automóvil para el evento en Hungaroring, con nuevas piezas que incluyen un alerón delantero actualizado y cambios en el conducto del freno trasero.
Verstappen terminó la primera y la segunda práctica en P2 en la tabla de tiempos y, cuando se le preguntó al final de la jornada del viernes qué pensaba sobre las mejoras, el holandés respondió: “Creo que tuvimos un buen día, por supuesto que todavía hay mucho que aprender y optimizar.
“Pero creo que fue un comienzo sólido del fin de semana y ahora intentaremos analizar los detalles para intentar hacerlo un poco mejor.
“Además, la FP2 se vio un poco interrumpida [por el accidente de Charles Leclerc], por lo que no pudimos hacer todas las tandas largas que queríamos. Por supuesto, a todos nos pasó lo mismo, pero sí, analizaremos las cosas. Creo que no fue un mal comienzo de fin de semana y sí, trabajaremos a partir de ahí”.
Cuando se le preguntó si él y el equipo esperaban volver a lo más alto del podio este fin de semana, Verstappen agregó: “No lo sé. Simplemente nos dejaremos llevar y veremos qué sucede”.
Del otro lado del garaje, fue un día decente para Pérez, que se ha encontrado bajo presión últimamente después de una serie de carreras difíciles. El mexicano se mostró más cómodo al volante de su RB20 en la segunda práctica y terminó la hora en el cuarto lugar.
“Creo que hemos dado un paso muy bueno desde la primera práctica hasta la de la tarde”, comentó Pérez después. “Hemos hecho los cambios adecuados, hemos tomado la dirección correcta y, sí, nos sentimos bien. Creo que también la tanda larga parecía prometedora, así que, sí, veremos qué nos depara el resto del fin de semana”.
Reflexionando sobre si esta es la vez que más cómodo se ha sentido en los últimos tiempos antes de un fin de semana, el piloto de 34 años, que salió de la clasificación en la Q1 la última vez en Gran Bretaña después de que su auto quedara varado en la grava, bromeó: “En Silverstone estaba feliz después del viernes, pero, ya sabes…
Y añadió: “Creo que sí. Creo que ha sido un viernes muy bueno, especialmente por la dirección que hemos tomado con los pasos que hemos dado a lo largo del día. Eso es lo mejor que podemos hacer y eso es lo que realmente importa, así que ha sido realmente positivo”.
En cuanto a la dirección tomada el viernes en Hungría, Pérez explicó que todavía quedan algunas áreas en las que trabajar de cara al futuro.
“Creo que [hemos estado] simplemente tratando de ajustar la configuración… todavía hay un poco de descorrelación en el simulador en el que estamos trabajando, para comenzar el fin de semana mucho más cerca”, dijo el seis veces ganador de carreras.
“Pero, sí, al final del día es una cuestión de juntar todo en el momento adecuado, y nuestro momento llegará, así que sigamos concentrados por ahora y [miraremos] hacia adelante, al mañana”.
Sin embargo, no fue una hora del todo tranquila para Pérez, ya que estuvo a punto de ser alcanzado por Zhou Guanyu cuando el Kick Sauber sufrió un trompo dramático.
“Sabía que venía así que me hice a un lado, y cuando lo vi girar tuve que ir a la izquierda bastante rápido para evitarlo, y afortunadamente logré evitarlo y no tuve ningún daño, así que eso estuvo bien”, comentó el piloto de Red Bull sobre el incidente.
